Ñ “Del Zonda a la Marinada”.
Cuando hablamos de vinos de la variedad Malbec, unos pueden referirse a los viñedos franceses del Sudoeste, como Cahors y en cambio la gran mayoría se va a referir siempre a Argentina, y de forma más concreta a la provincia de Mendoza, un piedemonte, donde la luminosidad y magnitud de los Andes otorga a los vinos una frescura, inusual a la de otras latitudes.
En efecto, frío, luz, nieve, altura y el azotador viento Zonda que arrastra vehículos y personas con una temperatura atroz, pero estos cambios climáticos, hacen en parte que los vinos en esta zona tengan ese fresco y frutal equilibrio .
Pero dentro de Mendoza y sus bonitos viñedos, aún podemos ahondar un poco más y llegar a uno de los denominados cinco oasis mendocinos, nos referimos a las cinco subzonas o pequeñas DO, en este caso hablamos de una de las que más prestigio tienen como es el famoso Valle de UCO, casi todo el mundo dice tener una viña en este encantador valle, donde un subsuelo de grandes piedras arrastradas por las tormentas que bajan desde los Andes le dan su singular aporte de cuerpo y mineralizad y el sol su perfecta maduración, fruta, etc..
La Malbec de FINCA –Ñ-
expresa todo esto, concentración, fruta, frescura y acidez en su punto idóneo, longevidad y esas notas de zarzamora con un fondo de madera y clavo, que es en parte lo que llamamos tipicidad varietal, en unión de unos taninos poderosos, pero amables domados por la crianza en barricas de roble americano nuevas, cuya micro-oxidación lenta y constante le aportan cremosidad. Donde tomarlo mejor que acompañado de un plato de buenas carnes rojas o mixtas asadas, como nuestra parrillada o graellada, o bien un asado de cordero, eso si, junto a la suavidad que nos da el viento marino de nuestras costas como es la Marinada.
En definitiva un Malbec, excelente, desde la viña en el famoso Valle de UCO hasta el nombre.
Salud y vino Juan Muñoz Ramos