La empresa familiar Castro y González han sabido adaptarse a los ritmos actuales: administración, gestión, globalidad, una red de distribución internacional asentada en Francia, Italia, Alemania, Bélgica, Holanda, Reino Unido, Suiza, Rusia y con incrementos de ventas a Japón, China y Hong Kong. Impresionante. Pero hay algo que continúa como siempre. El tiempo de reposo de sus cerdos, para que la calidad de sus embutidos sea suprema. Desde 1910, Castro y González, firma de jamón ibérico de Guijuelo, han mantenido intactas sus tradiciones.
jamón bellota